4 de noviembre de 2008

Este martes 4 de noviembre quedará en la memoria de todos como un día histórico. Aquí en Australia fue el día de la “Melbourne Cup”, una carrera de caballos que paraliza el país a las 3 de la tarde por 5 minutos y en los que todos esperan haber apostado al caballo ganador. Pero como alguien decía el otro día, “hay que ver como son los estadounidenses con su afán de protagonismo, que logran difuminar la importancia de uno de los días más importantes para Australia”. Pues precisamente a las elecciones en este país es a lo que me refiero.
Hoy ha sido el día en que Obama fue elegido presidente de la que hasta ahora es la nación más rica del mundo y además, la mas influyente política y financieramente hablando, ésta última cualidad más que demostrada con la crisis que estamos padeciendo.

Parece que el señor Obama es un buen político, lo que quiere decir, que escucha, es dialogante y razonable. Cualidades, que sin duda alguna, son las que le han valido la presidencia de su país. Bueno, también cabe añadir que es un gran orador, porque por muy maravilloso que seas, debes saber cómo venderte.

Pero además de esto Obama provoca optimismo. Y este factor tan subjetivo de nuestras pequeñas mentes humanas creo que es crucial para afrontar el futuro. El optimismo hace que los inversores aflojen dinero o que los políticos del mundo estén más propicios a hablar. Necesitamos a alguien optimista y necesitamos sentirnos todos optimistas, a la par que realistas (ya que esto me recuerda a nuestros políticos optimistas y poco realistas diciendo que España estaba más protegida frente a la crisis que otros países europeos, cuando era un secreto a voces que el elevado producto interior bruto español era en su mayor parte ficticio e inflado por el sector de la construcción, fenómeno que tenía los visos de finalizar tarde o temprano dado el alto nivel de especulación y precios abusivos que se habían impuesto en el mercado).

Volviendo al tema de esta reflexión, Obama además será el primer presidente “negro” de la Casa “Blanca”. Y esto es importante para una sociedad en donde aunque de derecho todos son iguales, de hecho muchos no sienten o no les hacen sentir así. Y pese a que no estoy de acuerdo con el “voto racial”, es decir, persona negra vota a persona negra, sí que he de reconocer que este es un paso de gigante para que en un futuro se vote al candidato por su validez y no por su color de piel. Y aquí le puedo decir a la reina de España, que los negros, como los homosexuales, salen a la calle a celebrar y a “colapsar el tráfico” porque existe una cosa llamada racismo, como existe una cosa llamada “pena de muerte” para homosexuales en ciertos países del mundo o muchas opiniones y perjuicios en contra en nuestro propio país. Pero este discurso sobre las palabras de la reina de España pertenece a otro artículo (no pude evitarlo, lo tenía dentro desde que leí sus palabras)

Por el momento, vamos a soñar con un mundo mejor.
Y sinceramente espero que se abra una etapa de prosperidad, no solo económica, sino de conquista de derechos y reducción de diferencias de desigualdades.

Buen miércoles para todos y muchas gracias a todos por los comentarios que dejáis en el blog. Como Nachete dice, sí es verdad que dan ánimos y me encanta leeros. Abrazos.